#30 El estigma del despido

El sector digital lleva unos años viviendo una etapa dorada. Todas las empresas incluyen en sus presupuestos anuales una partida para la transformación digital. Esto se traduce directamente en la necesidad de personal cualificado para llevar a cabo este proceso. Es decir, son años de mucho curro para nosotros, años de vacas gordas donde tenemos la suerte de «elegir» dónde y cómo queremos trabajar.

Sin embargo, en los últimos meses no paran de llegarnos noticias de despidos en las big tech. Amazon, Google, Meta, Microsoft… todas están haciendo recortes basados principalmente en la necesidad de adaptarse a la situación económica mundial y de paliar una sobre-contratación anterior. Y esto se traduce en personas reales que cada día reciben la horrible noticia de que se han quedado sin curro.

Recibir la carta de despido es duro. Da igual que haya rumores de recortes en la empresa, que sepas que se están rifando esas cartas, que lleves semanas viendo cómo reciben la noticia otros compañeros. Puedes tener la intuición de que te va a tocar, pero cuando recursos humanos te llama y te da la noticia, cuando tus miedos se hacen realidad, el golpe es muy duro.

El despido puede venir por motivos totalmente ajenos a ti. Cosas que no puedes controlar, como la situación económica, la pérdida de algún cliente importante para la compañía, un cambio de dirección en la estrategia empresarial… Sea cual sea el motivo siempre te preguntarás lo mismo, ¿por qué yo? ¿qué he hecho mal? ¿será que no soy un trabajador válido?

Debes de alejar de tu mente esos pensamientos negativos. No es culpa tuya. Incluso en el caso de que el despido sea una consecuencia directa de tus actos, por ejemplo, porque has tenido un encontronazo con el jefazo que no debías, porque algo de tu trabajo no ha salido como se esperaba o porque tu rendimiento ha bajado por ese problema personal que no puedes quitarte de la cabeza. Da igual, no te fustigues, no es culpa sólo tuya.

Busca refugio en la gente que te quiere, no tengas miedo de clamar al viento que te han despedido. Hay muchos profesionales y amigos con los que has trabajado a lo largo de los años que seguro que te echarán una mano para salir adelante. Que saben que tú vales mucho, que eres un buen trabajador y quizás conozcan el sitio en el que encajarás perfectamente.

No pienses que ese despido es un fracaso, tómatelo como un aprendizaje, porque te aseguramos que en ese proceso vas a aprender muchas cosas. Saldrás más reforzado, verás quienes son tus verdaderos amigos y, sobre todo, le perderás el miedo a no tener trabajo. Y esto último es maravilloso porque te hará mas libre como trabajador en tus siguientes empleos.

Como sociedad debemos de eliminar el estigma del despido. No podemos juzgar la valía profesional ni personal de una persona sólo porque lo hayan despedido. El mundo es muy complejo y los factores que originan esa situación son infinitos.

Así, que ya sabes, si has sido uno de los afectados por los recortes que se están sufriendo en las compañías TIC, desde aquí te mandamos todo nuestro apoyo. Pasa el duelo lo más rápido que puedas y dile al mundo que estás listo para iniciar una nueva etapa profesional. Muy pronto encontrarás un nuevo proyecto que te ilusione. Incluso puede que dentro de unos años des las gracias por ese despido que desencadenó el mejor cambio de tu vida. Porque cuando se cierra una puerta, siempre se abre una ventana 💚