#10 ¿Datos, la gran mentira? 📈

Te levantas un lunes con ganas de cambiar el mundo, tienes un arsenal de datos en tu poder, prácticamente lo podemos medir todo, decisiones en base a datos nos repiten una y otra vez en todo curso y en toda formación. Mover palancas en base a datos, el nuevo dogma que se dice mucho pero se practica muy poco o mal.

En paralelo, sigues leyendo que los datos son el petróleo del siglo XXI puedes sentir orgullo de pertenecer a esa industria o puedes ser más humilde y pensar que en mayor o menor medida todos de alguna forma usan los datos en su día a día. No siempre de forma consciente y no siempre haciendo gala de ello, pero los datos están ahí, sea cual sea el sector.

Lo que más nos gusta del símil que se hace con el petróleo es pensar en el petróleo sin refinar, el crudo. Se nos olvida muchas veces que para tener esa aplicación práctica, ese uso “real” y el progreso que el petróleo nos trajo a la sociedad hay todo un proceso de refinamiento por detrás y que se tardó años y años en llegar.  Con los datos nos pasa lo mismo y es bueno recordarlo.

Te tomas el primer café y despiertas de tu sueño. Descubres que vives en una especie de “gran mentira” relacionada con los datos. Empiezas a sentir frustración y mucha desilusión. Las redes sociales invaden tu espacio con mensajes de casos de éxito adornados con capturas de pantalla llenas de gráficos, mucha captura pero poco acceso al dato. El mundo lo peta en base a ellos y tú no.

¿Qué le pasa a mis datos? ¿Qué hago mal? Te preguntas.

A la mierda, la realidad no es esa. No te frustres, no estás solo. Nos pasa a todos. Hay mucho ruido acompañado de gráficos molones.

La realidad más terrenal y profesional con los datos suele ser que sirven como un simple argumento y que nos los encontramos muchas veces tergiversados, sesgados, manipulados, maquillados… Usados solo para ganar batallas: la tuya, la de un compañero, la del departamento o la de la propia empresa. 

¿Analizamos e informamos de forma neutra o se nos notan los colores de nuestras preferencias, objetivos, de quién nos paga, nos cae bien o nos gusta?

Usar los datos con honestidad, neutralidad es tremendamente complicado en un mundo marcado por objetivos e intereses y se termina analizando pensando en el premio, la gratificación o simplemente la supervivencia.

No, no es culpa tuya. Está montado así el tinglado, solo formas parte de la rueda.

De todas formas, este mal no es propio del mundo profesional es el llamado “postureo con datos”. La gente intenta comprender las métricas y saber cuáles tienen tirón para hacerlas bailar a su favor y gritarle al mundo: “soy el puto amo”.

Hay que acordarse también que entendiendo cómo funcionan las métricas y cómo se recopilan, trampearlas es relativamente sencillo y estas “trampas” se pueden aplicar tanto a la herramienta de email marketing, al Google Analytics, a los logros del Strava, al deporte amateur y de domingo o a cualquier historia social medible.

En nuestro caso es fundamental conocer estos entresijos para poder detectar las trampas y quizás así, en el sitio y en el momento correcto podamos usar los datos de la forma y con el criterio con el que siempre soñamos.

Y sí, los datos cambiaron las reglas del juego, al puro estilo Moneyball pero todavía estamos lejos de esa precisión, eficacia y utilidad en el sector digital. Si nos miramos al espejo nos vamos a parecer más al mundo del fútbol que al del béisbol. 

El exjefe de analítica del Barça lo explica muy bien en este artículo que podemos extrapolar perfectamente a nuestro mundillo en el que terminamos haciendo remiendos, parches y creemos que estamos compitiendo, que estamos usando los datos pero nos encontramos haciendo prácticamente lo mismo que hacíamos antes sin datos o más bien sin tantos datos.

La realidad del sector digital es que existe una elevada rotación y todo se está haciendo de una forma muy personal. Se cuenta con pocos recursos, pocos procesos y pocos estándares que terminan limitando el desarrollo.

Siguen existiendo en las empresas los silos de datos. Cada departamento tiene el suyo y cada uno de su padre y de su madre. Los departamentos se baten de forma independiente con los mismos problemas una y otra vez pero no lo sabían, no se hablaban.

Nos gusta hablar de los lagos de datos (data lakes) como solución a esta problemática pero se construyen con cimientos de barro y suelen tener más parecido con un juguete que ser esa solución real que se esperaba.

Quizás en el sector digital falte músculo, madurez o planificación pero no todo es oro lo que reluce y no estás solo en ello.

🔎 Datola Holmes 🎖️

Viene el reto, viene el Datola Holmes: un acertijo, una pregunta, un enigma que solo los más curiosos serán capaces de acertar edición tras edición.

No tengas miedo a equivocarte, para eso estamos aquí. 

#10 ¿Qué significan las siglas RSS?

Enlace Newsletter:

Si prefieres leerla tal y como la leyeron nuestros suscritores. No te preocupes, te la dejamos por aquí:

https://ml.datola.es/h1q1d2

Equipo Datola
Equipo Datola

Debatimos, compartimos y aprendemos entre profesionales de la analítica digital, el marketing y el mundo de los datos.

Deja un comentario