#34 EuforIA

Es el tema de moda. No ha dejado de serlo desde la newsletter #23. Han pasado meses, así que volvamos a valorar la influencia de la inteligencia artificial (IA) en nuestro campo de analítica y datos.

En primer lugar, seamos honestos: en un mundo complejo e interconectado con avances tecnológicos que crecen exponencialmente, resulta difícil predecir los efectos de segundo orden y las consecuencias a largo plazo. Sin embargo, podemos explorar algunas tendencias y reflexionar al respecto.

Meses atrás ya hablábamos sobre las tareas que las máquinas podrían realizar en nuestro lugar, lo que, en teoría, podría traducirse en la pérdida de empleos. Esto parece ser una realidad cada vez más palpable. Las máquinas están asumiendo tareas que antes eran realizadas por humanos, y esto es irreversible, tal como lo comprobaron los luditas en el siglo XIX con la Revolución Industrial. Una vez se produce un avance, no hay vuelta atrás; esto se conoce como el principio de la irreversibilidad del conocimiento.

Sin embargo, esta transformación no necesariamente es negativa. Nuevas profesiones están surgiendo y el mercado demanda perfiles especializados en comunicarse con las máquinas. Además, ¿cuántas tareas tediosas y rutinarias querrías dejar atrás como analista? Cosas como revisar tendencias, validar la calidad de los datos, configurar herramientas, documentar y replicar etiquetas, o responder preguntas sencillas que no requieren análisis profundo. Piensa en cuánto más tiempo tendrías para concentrarte en tareas de mayor valor y disfrute.

A pesar de que la IA avanza a pasos agigantados, todavía parece difícil que una máquina tenga el contexto y el conocimiento del negocio que posees. No puede igualar tu visión global, juicio, intuición basada en experiencia ni la habilidad de manejar con destreza un equipo. No comprenderá las emociones de los clientes ni sabrá escoger el mejor momento para comunicar un mal dato. Y sobre todo, no podrá hacerse preguntas críticas por sí misma.

En contraposición, la IA sigue posicionándose como una valiosa compañera en tu día a día. Por ejemplo, la creación de diseños y programación requieren cada vez menos esfuerzo gracias a la IA. Aunque el conocimiento y la experiencia sigue siendo un diferencial, las nuevas herramientas dan acceso a los sectores a más gente y homogeniza resultados. Esto no es solo una tendencia pasajera; está aquí para quedarse.

Tendremos que lidiar con los peligros. Las fake news y la suplantación de identidad son retos ya presentes que hay que atajar. Contar con un pensamiento crítico y un conocimiento y madurez digital es una buena forma de hacerlo.

Los cambios pueden ser rápidos y dolorosos si no sabemos aprovechar los aumentos en productividad que la tecnología puede ofrecer para redistribuir cargas y recursos. La capacidad de adaptarse a las novedades será una habilidad cada vez más valiosa. ¡No dejes de aprender y de seguir a Datola!

PD: y si quieres ir practicando… datola.es/datolaGPT